lunes, 6 de febrero de 2017

Todo lo que tienes que saber para sacar tu primera licencia de conductor



Si pretendes ser el sucesor de Schumacher en el mundo automovilístico, existe un paso muy importante para iniciar esa aventura. Antes de seleccionar tu carro, el motor, las llantas, los colores y cotizar seguros de autos; debes tramitar tu licencia de conductor. Porque recuerda que todos los grandes astros de la velocidad la tienen (Sí, hasta en el mundo cinematográfico de Rápidos y Furiosos, “Toreto” la tiene; bueno mejor dicho alguna vez la tuvo).

Lo principal es ser mayor de edad. De ahí, como en cualquier tipo de trámite, los pasos a seguir son tener la documentación personal, una declaración jurada que certifique que no tienes algún impedimento legal para conducir, certificado de salud, aprobar tanto el examen teórico y práctico (sí, tendrás que estudiar). Por último, pero no menos importante, todo lo contrario, más bien, es el pago por tramitar todo.

Pero, en sí depende mucho el tipo de carro y uso que le darás. Pues sí, el Ministerio de Comunicaciones tiene ciertas categorías donde tú debes elegir según tus intereses. Solo existen dos tipos de clases de Licencias para conducir: Clase A y B. Esta última solo hace referencia a vehículos de dos ruedas.

Dentro de la clase A, que solamente abarca vehículos de 4 ruedas, existen seis categorías. Pero tranquilo te explicaré en qué consisten exactamente para que estés bien informado a la hora de elegir.

Categoría A

IA. Esta licencia solo autoriza la conducción de vehículos que se destinan al uso personal. En esta categoría entran desde autos pequeños hasta camionetas (incluso las camionetas conocidas como “Areneras”)

IIA. Básicamente es lo mismo si lo comparamos con la IA. Lo único que cambia es la utilidad que se le da al vehículo. Con este tipo de licencia podrás ejercer servicios de taxi, turísticos, de transporte internacional transfronterizo de pasajeros y vehículos de emergencia. Además, al tener esta licencia se obtienen los permisos de la IA; pasa lo mismo con todas las demás licencias que iremos mencionando.

IIB. Esta permite conducir las populares combis y coasters. La regla exactamente dice que el peso vehicular bruto debe ser no más de seis toneladas.

IIIA. Si se llega a sobrepasar las 6 toneladas tendríamos que solicitar este tipo de licencia. Los autos que se adaptan a esta licencia son los microbuses (“micros”), bus interprovinciales, los mira buses (que se encuentran en cantidad por la plaza de armas) y los ómnibus del Metropolitano.

IIIB. Entramos al reino de los pesos pesados. Puesto que esta licencia permite la conducción de camiones con chasis cabinado, remolcadores, volquetes, entre otros. Es necesario recordar que al contar con esta licencia tenemos permiso para realizar todas las actividades de las anteriores.

IIIC. Esta es la última y te permite conducir autos de las dos anteriores categorías (IIIA – IIIB) de manera indiferente.

Un último dato es que a los primerizos la duración de la licencia es de dos años, mientras que a los más experimentado cinco (hasta los 70 años puesto que de ahí comienzan una serie de exámenes un poco más rigurosos).

Cómo hemos observado el mundo de los motores, llantas, papeletas y demás tienen todo un procedimiento para ser aceptados. Puesto que no es lo mismo conducir un “escarabajo” que un camión, porque para manejar, digamos un volquete se necesita una gran responsabilidad civil de carga peligrosa. 

0 comentarios:

Publicar un comentario